¡Buenos días, amigxs! Aquí estamos una semana más y esta semana me apetecía compartiros un vídeo que me hizo pensar en por qué hacemos ciertas cosas que, en el fondo, no queremos hacer. ¿Por qué nuestra zona de confort suele ser el sufrimiento o la queja o la ira continua o la servidumbre o el postureo pero nunca es algo que realmente nos completa como personas, nos mejora y nos hace felices? Bob Dylan dijo una vez: “Todo lo que quieres en la vida está fuera de tu zona de confort” y pienso que así es. Sin embargo, qué difícil es salir de ella, ¿verdad? Dar ese paso, caer al vacío, entrar en ese territorio gris y terrorífico que es la incertidumbre.
“Aunque nada cambie, si yo cambio, todo cambia”, Marcel Proust.
Animémonos a cambiar, a cantar fuera de la ducha, a vestir raro, a ir sin maquillar al trabajo porque ese día no nos ha dado la gana, a decir que nos gusta el hígado poco hecho o que nos sentimos realizadxs después de un buen pedo.
A coger la sartén por el mango.
Porque, “si esa sartén es tu vida, ¿quién está agarrando el mango de tu sartén? ¿Lo tienes tú?”
Gracias, Wendy, por el recordatorio. ¡Nos vemos!
Por cierto, si os apetece ver el vídeo completo, pinchad aquí