¡Buenos días, amigxs! La mejor excusa para no intentarlo es decirnos a nosotrxs mismxs que una sola persona no puede hacer nada. Una sola gota de agua no aplaca la sed, pero muchas gotas juntas pueden llegar a ahogarte. Así que, en realidad, lo más importante y provechoso a la larga es pensar y creer que no somos una sola persona sino muchas las que estamos aportando nuestro granito de arena o, por continuar con el símil de antes, nuestra gota de agua.
Y esto me lleva al vídeo de hoy y a los hábitos que propone. El primero es:
APOYARNOS MÁS Y COMPETIR MENOS.
Este mundo no está pensado para querer trabajar juntos. Desde la escuela (cada vez menos) se ha fomentado siempre la individualidad: mesas separadas en filas, trabajos individuales, notas en los exámenes, etiquetas que, a la larga, te hacen sentirte aislado… De unos años a esta parte parecía que, poco a poco, todo esto iba cambiando, pero ahora con el COVID hemos tenido que dar un paso atrás (aunque espero que, con el tiempo y las ganas, se reajuste para que los trabajos en equipo, por ejemplo, se retomen de la manera que sea).
Y desde la familia tampoco lo hemos hecho demasiado bien. Primero somos nosotros y los nuestros y luego ya, si eso, los demás.
Antes, lxs vecinxs formaban parte de la familia y sabías que, si pasaba cualquier cosa, no hacía falta recurrir a los familiares (sobre todo si vivían lejos) porque en la puerta de al lado había alguien que siempre estaba dispuesto a echarte un cable.
Todos sabemos que, si no trabajamos juntos, el mundo no tira para adelante, solo hay que recordar las huelgas: de los conductores de transporte público, de médicos y enfermeras, de recolectores de desechos, de maestrxs o de empleadas del hogar. Da igual el que sea, si alguno deja de hacer su trabajo, el frágil equilibrio en el que vivimos, se tambalea. Porque todos cumplimos una función importante dentro de la sociedad (no quiero ni imaginarme, por ejemplo, una huelga de madres o de abuelxs que, aunque no cobren, son un pilar imprescindible).
Y lo mismo pasa en cualquier tipo de empresa, de asociación, de institución…
Así como con la naturaleza. Solo hay que fijarse en el clima, en cómo está cambiando a causa de la acción del ser humano, una de las piezas que la conforman. Como nosotrxs no estamos funcionando como equipo (“da igual que tire este papel al suelo, total, está lleno de papeles”), somos la ficha de dominó que está haciendo caer todas las demás.
Hay que trabajar unidos, debemos impulsar el “codo con codo”, el “juntos podemos con cualquier cosa” porque “lo que no sabes hacer tú lo sé hacer yo”.
LIBRO RECOMENDADO: No one is too small to make a difference. Os he linkeado el libro en español (“No eres demasiado pequeño para hacer cosas grandes”)
El segundo hábito sería:
CAMBIAR LOS HÁBITOS DE CONSUMO.
En el vídeo habla, entre otras cosas, de la compra de ropa. Recuerdo hablar con mi abuela y ella decirme que, cuando era joven, tenía tres mudas: dos de diario y una para los domingos o días festivos. ¡Tres mudas! ¿Quién tiene tres mudas ahora? Es evidente que los tiempos no son los mismos y que la calidad de la ropa “barata” tampoco es la misma, pero se ha creado una necesidad que es incompatible con la sostenibilidad y, en mi opinión personal, tampoco con la salud mental. Creo que cada unx tenemos un estilo independientemente de lo que se lleve ese año. Pues eso es lo que debería primar, nuestro estilo sobre lo que está de moda. Eso nos llevaría a no comprar cualquier cosa. Y también tener en cuenta la calidad sobre la cantidad. Además de hacer que la ropa nos dure, coser un botón si se nos cae en lugar de comprar una camisa nueva, remendar siempre que sea posible, reutilizar, dar, intercambiar ropa, frecuentar tiendas vintage (que suelen tener ropa de segunda mano de calidad a un precio más asequible)…
Con ese espíritu os comparto el enlace de varias tiendas valencianas de ropa vintage que tienen página web (y tienda física), pero podéis hacer una búsqueda en Google porque hay muchas más.
THE WHITE CAT (Esta es solo online)
El enlace siguiente es a un artículo en el que hablan de tiendas de ropa vintage de la ciudad de Valencia. Las que yo os he puesto tienen muy buenas opiniones, pero os recomiendo que echéis un ojo por Internet a ver qué dice la gente antes de hacer el viaje. En el artículo aparecen algunas que no he compartido aquí.
Para acceder al artículo de HELLO pincha aquí
LIBROS RECOMENDADOS: Al borde de un ataque de compras
Tu consumo puede cambiar el mundo
Y, si pincháis aquí podréis ver cómo empezar con eso del “armario cápsula” con Elena HG. Si queréis ver la segunda parte de esta serie, pinchad aquí.
El tercer hábito es:
LEER LIBROS SOBRE PERSONAS/HISTORIAS DIVERSAS.
“Cuando acudes al relato de alguien muy diferente a ti, muchas veces, lo que te acabas encontrando son las cosas que tenéis en común”, Raquel Brune.
Es importante empatizar, ver las cosas (o intentarlo) desde el punto de vista del otro. Eso nos ayuda a comprender (que no sentir) cómo está viviendo esa persona ese suceso concreto, poderlo comparar con cómo lo vivimos nosotrxs y llegar a lo que compartimos o, al menos, a no sentirnos alienadxs sino unidxs. Para esto, los libros son una gran ayuda. A través de ellos y sus distintxs narradorxs y protagonistxs puedes ponerte en la piel de otras personas y ver las cosas desde otra perspectiva.
En este caso el LIBRO RECOMENDADO ES: El lenguaje de las espinas. Es un retelling de cuentos clásicos escritos desde el punto de vista de otro personaje distinto al que conocemos como el/la protagonista. Me encantó y la edición es preciosa. También tiene una muy buena traducción (que siempre es de agradecer).
El cuarto hábito es:
PRESTAR ATENCIÓN A LAS PERSONAS MAYORES.
Parece que nos vayamos a quedar como estamos, que siempre vayamos a tener 20, 30 o 40 años. Pero no, amigxs, el tiempo pasa para todxs y llegaremos (si tenemos suerte) a ser ancianxs y, si nos cuidamos, habrá más posibilidades de que la vejez sea relativamente cómoda, tranquila y, sobre todo y lo más importante, independiente (que no necesitemos de la ayuda de otros en nuestro día a día).
Antes, el/la abuelx era una persona venerada y respetada, pero poco a poco, ha ido desapareciendo de la sociedad pública (televisión, cine…). Es como si no existieran o como si hacerse mayor fuese un pecado. Solo hay cremas para mantenerte joven y tersa (sobre todo si eres mujer), tintes para que no se te vean las canas (porque todxs sabemos que las canas les hacen interesantes a ellos, pero a nosotras nos hacen viejas), operaciones y liftings… En fin, ya sabéis de lo que hablo. Pero ellos y ellas siguen estando ahí, de hecho, muchas familias jóvenes no podrían salir adelante si no fuese por lxs abuelxs. Y creo que es gracias a esto que su figura empieza a estar “al alza” de nuevo. No somos nadie sin las personas mayores. Desde mi punto de vista, dignifican a la sociedad y todo lo que tocan. Son personas que ya han pasado por donde hemos pasado nosotrxs y, la mayoría de las veces, han sufrido situaciones mucho peores que las nuestras. Preguntadles por su vida y su pasado, por el mundo que vivieron. Si os interesáis por la historia familiar comprobaréis que suele ser cautivadora y, la mayoría de las veces, sorprendente. Se aprenden muchas cosas.
Algunas películas que os recomiendo son: “UNA HISTORIA VERDADERA”, “LAS BALLENAS DE AGOSTO” y “MAGNOLIAS DE ACERO” (en esta última hay un poco de todas las edades).
LIBRO RECOMENDADO: El castillo ambulante. Es posible que os suene por la película del mismo título de Estudios Ghibli (una maravilla, por cierto) que está basada en este libro, pero os recomiendo encarecidamente que os leáis el libro, es más divertido.
Y por último:
NO COMPARTIR/DIFUNDIR NOTICIAS SIN CONTRASTAR PRIMERO.
De esto hemos hablado más veces. Da igual que la “noticia” sean unos perritos que van a sacrificar, algún suceso político, que hay un secuestrador en nuestro pueblo… Hay que verificar esa “noticia” antes de compartirla porque una mentira repetida hasta la saciedad acaba convirtiéndose en verdad, aunque siga siendo mentira. Y las redes sociales se llenan de bulos que solo llevan a minar confianzas y a saturar hasta el hartazgo.
Para poder corroborar las “noticias” que os llegan, os recomiendo la siguiente página: MALDITA.ES. Ahí podréis buscarla y confirmarla o no y, si no la tienen, podréis mandarles un mensaje con lo que os ha llegado para que lo investiguen.
La página la dirigen periodistas que han trabajado (y trabajan) para varias emisoras de radio importantes. Además, no solo te dicen si es o no mentira, argumentan y aportan pruebas.
Sobre la sostenibilidad y comprar de forma más consciente ya sabéis que en nuestra página web tenemos una sección dedicada a esto donde os compartimos el enlace de tiendas online sostenibles y páginas web que se interesan por el tema. Podéis acceder directamente pinchando aquí.
Solo una cosa más. Un hombre mayor que habla con mucha sabiduría y amor sobre la vida: Pepe Mújica. Podéis escuchar algunas de sus reflexiones pinchando aquí. No tienen desperdicio.
Y nada más por hoy. Creo que al final ha quedado un post un poco largo, pero también muy completo. Espero que disfrutéis de las recomendaciones. Ya me contaréis. ¡Nos vemos!